Chanel dejo su huella en el mundo de la moda con su "pequeño vestido negro". El estilo sencillo se convirtió en un clásico instantáneo y se puede encontrar en los armarios de las mujeres en todo el mundo en la actualidad.
Esta prenda inventada por coco chanel en los años 20 y popularizada por Audrey Hepburn en la película Breakfast at Tiffany`s (1961) pasó de ser tendencia en esos años, a un básico necesario hoy, en el armario de toda mujer.
Su éxito radica en la versatilidad. Puede usarse en innumerables ocasiones con solo un cambio de accesorios y zapatos. Se dice también que su color, el negro, va bien a cualquiera y eso sumado a su propiedad estilizadora y connotación de glamour, lo hacen el ganador absoluto.
No distingue clases sociales, gustos, o edad, todo depende con que lo combines o acompañes para que éste hable de tu personalidad y estilo. Al ser una prenda clásica es atemporal, no pasa de moda, mientras más simple sea, más funcional y duradero será.
La simplicidad y el buen gusto esta mezcla de ambos da como resultado sin duda, el mini vestido negro. Es necesario tener al menos uno y; antojarse de uno nuevo más que un gasto es una inversión en estilo que vale la pena.
Delicado, romántico, elegante o vanguardista, llévalo como quieras. Combínalo con un blazer y tacones para la oficina, sandalias altas y un maxi-accesorio como aretes, pulsera o collar para la noche, con bailarinas y una pashmina para un look relajado, con sandalias y un turbante o sombrero para recrear un look folk o para clima tropical.
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